VIENE OTRO PAQUETAZO PARA VENEZUELA.

Un PESO COLOMBIANO cuesta 50 Bolivares, Luego del 8D = 120 Bolivares

José Guerra con La Razón: Viene otro paquetazo

8 Octubre, 2013.=> HAMBRE, MISERIA, Mayor INSEGURIDAD, Mayor Escasez, ESTRES  !!

Enrique Meléndez / La Razón / 6 oct 2013.- Según el economista José Guerra, el gobierno prepara para el próximo año otro paquetazo, que incluye una nueva devaluación que se adoptará, según su estimación, para después de las elecciones municipales, pero que será inevitable.

“Ese paquetazo tiene dos componentes importantes; uno, una nueva devaluación y, dos, el aumento de las tarifas eléctricas; que ya fue anunciado por Jesse Chacón. Entonces, esto se va a traducir en un aumento del costo de la vida, y esto en vista de que la devaluación en Venezuela, a diferencia de otros países, lo que hace es enriquecer al gobierno”, argumenta el también profesor de la UCV.Parece que el gobierno ha tenido mucho éxito propagandístico en la siembra en la conciencia de la gente la matriz de opinión de que existe, verdaderamente, una guerra económica. ¿Hasta cuándo se puede sostener en esa situación?

-En realidad, la guerra económica que hay es contra el pueblo venezolano; que es el que está sufriendo una situación de escasez muy fuerte y de alto costo de la vida; que está deteriorando, significativamente, el salario de la gente, que trabaja en el país. La inflación, que no es sino el alto costo de la vida, siempre es responsabilidad de gobierno en todas partes, si tomamos en cuenta que el gobierno es responsable del dinero, es responsable del gasto público.

-Pero éste es un gobierno tan irresponsable, que ni siquiera la responsabilidad de la inflación la está asumiendo. Entonces, aquí hay una teoría económica muy curiosa, y es que cuando la inflación baja, entonces eso es un logro del gobierno, y cuando la inflación sube, entonces eso es culpa de los empresarios. Esa es una cosa, absolutamente, contradictoria y loca.

-Aquí el gran beneficiario de la guerra económica son los medios de comunicación; que tienen una pauta publicitaria sostenida, e ingresos muy altos, porque el gobierno se ha dado a la tarea colocar micros cada diez minutos en las principales cadenas de radio, para tratar de torcer una matriz de opinión, y hacer creer que el desabastecimiento y la escasez es un problema de los comerciantes, y no una responsabilidad del gobierno.

¿Acaso esta crítica situación del desabastecimiento, la escasez y la inflación se deriva de la política cambiaria, que ha mantenido este gobierno, y que, quizás, ahora se le están viendo los vicios y distorsiones?

-Obviamente, la inflación la generó el gobierno, y lo hizo de la siguiente manera. El 8 de febrero hubo una devaluación del 40%, y eso, obviamente, se trasladó a los costos de producción y, por consiguiente, a los precios. Luego, el gobierno decretó un aumento salarial de 30%, que también tiene una incidencia inflacionaria. En tercer lugar, el gobierno restringió la entrega de divisas; estableció un Sitme que fracasó; lo mismo que lo que vino a continuación, que fue el Sicad: otro cabezazo; lo cual cortó la entrega de divisas.

-Con esas situaciones, es evidente que había un factor que estaba presionando los precios, que era el factor de costos; porque la divisa ahora valía más y no se conseguía. Pero, hay un cuarto factor, que es el fundamental para mí, y es que el BCV ha estado emitiendo dinero inorgánico, para financiar el déficit de Pdvsa, y el déficit de las empresas de Guayana.

-Este dinero ha venido presionando de manera muy dura al dólar negro, que lo ha llevado a niveles de casi siete veces el precio del mercado oficial. Esto es una devaluación de facto del bolívar, que también se expresa en incrementos de precios. De manera tal que esos cuatro factores son los que explican el problema, y los cuatro factores que disparan la inflación son obra del gobierno.

-El gobierno, en vista de que se ve acorralado por la inflación, con una campaña propagandística inclemente, trata de hacer caer la responsabilidad en otros. ¡No! Aquí el responsable de la inflación es el gobierno.

A raíz de la última subasta del Sicad, el gobierno anunció que estaba en el diseño del esquema, para reactivar el mercado de permuta, y desde entonces ya se han colado varias semanas. ¿Qué explica esa tardanza?

-Se ha tardado porque en Venezuela no hay política económica. Aquí lo que hay son medidas urgentes, adoptadas a los fines de conjurar el incendio que hay en la economía, a falta de un plan económico. Hace 35 días Maduro anunció que venía un nuevo sistema complementario de divisas; que iba a ser libre, eficiente y con suficiente disponibilidad.

-Hace, exactamente, tres semanas, en una entrevista con la periodista Shirley Varnagy, Nelson Merentes anunció que venía el nuevo sistema cambiario; si se tiene presente que el esquema del Sicad está muerto; eso murió. No obstante, de entonces a esta parte han pasado veinte días, y no se ha implementado, y esto en virtud de que en el gabinete económico no hay liderazgo.

-Allí hay una contradicción muy grande entre, por una parte, Nelson Merentes, y, por la otra, Jorge Giordani. La tesis de Merentes es que la economía no puede funcionar entre esta brecha cambiaria tan grande, de casi 700 por ciento entre el dólar paralelo y el dólar oficial, y que hay que hacer algo; mientras que Giordani dice que sí puede funcionar, de que no hay que hacer nada; ya que la economía fluye, y más bien centralizar las importaciones en manos del Estado.

-Hasta que esta contradicción no se resuelva vamos a tener esta brecha cambiaria, digamos, distorsionante en la economía. Se trata de un gabinete económico tan devaluado, que Maduro tuvo que crear lo que se conoce como el Organo Superior de Defensa de la Economía, y que lo dirige el mayor general Herbert García Plaza.

-Por cierto, este general pareciera que entendiera mejor los problemas, que Merentes y Giordani juntos; porque, por lo menos, se ha acercado al sector privado, ha tratado de entender los problemas; bueno un enfoque, absolutamente, positivo sobre los asuntos; pero el problema es Maduro que no toma ninguna decisión; un presidente irresoluto; un presidente que no tiene nociones de donde está parado; no pareciera comprender nada de lo que está sucediendo en Venezuela y, evidentemente, eso ha privado al país de unas decisiones fundamentales.

-Si no se toman las decisiones rápidas, oportunas y coherentes, esta brecha cambiaria puede ampliarse más, y puede agravar el problema de la inflación.

Precisamente, en esa misma entrevista del ministro Merentes con mi colega Varnagy, él decía, en relación a los sueldos que están muy por debajo de la inflación; que, partiendo del hecho de que hoy en día ambos cónyuges trabajan, eso se traduce en dos sueldos, que sumados, sí están por encima de la inflación. ¿Qué piensa usted?

-Sí, son dos sueldos, pero también son dos bocas que comen. Entonces, una familia de cuatro miembros, y dos sueldos; definitivamente, no alcanza a cubrir los costos del hogar. En ese sentido, yo les propongo que hagamos una prueba: que un ministro y su respectiva esposa se pongan a vivir con el sueldo mínimo. Vamos a ver si van a poder hacerlo. Eso sería una buena prueba para determinar si con dos sueldos mínimos puede vivir una familia en una forma digna.

En caso de establecerse un nuevo esquema del dólar de permuta, de acuerdo a lo que se ha estimado, tendrían que ser restituidas algunas casas de bolsa; en especial, aquellas que se dedicaban a la venta de dicho dólar, y las que, no sólo fueron eliminadas, sino que también sus directivas fueron a parar a la cárcel; lo cual quedaría como una injusticia. ¿No le parece?

-La decisión de cerrar las casas de bolsas fue del ministro Giordani; de manera que las personas que estuvieron unos años presas, eran presos de Giordani. Ahora, al cabo de tres años, los tribunales dictaminaron que esas personas no tenían motivos, para estar detenidas, y los fueron soltando, y los soltaron a todos. Estos fueron presos de Giordani: estuvieron tres años presos por un capricho de Giordani.

-Ahora, ¿cuál fue la argumentación que se dio para cerrar las casas de bolsa? Primero, que las casas de bolsa hacían subir al dólar paralelo y, segundo, que las casas de bolsa era las que estaban detrás de la inflación. Cerraron las casas de bolsa; la inflación siguió subiendo, y el dólar negro siguió subiendo aún más todavía.

-De manera que no eran las casas de bolsa las que provocaban la inflación, sino que este flagelo, junto al alza del dólar negro, los que lo provocaban, en particular, es la política del BCV; que están creando y expandiendo dinero inorgánico sin ningún valor. Si aquí se quiere implementar algunas medidas económicas sensatas, lo primero que hay que hacer es tocarle la puerta al BCV, y pararle la emisión de dinero inorgánico, y que está acabando con la economía.

Ya la inflación se acerca al 40%…

-No, la inflación va rumbo al 50%. Aquellos que pronosticamos una inflación para 2007 en mi caso cercano al 30 ó 35 por ciento, nos quedamos cortos. La inflación va rumbo al 50%, sin ninguna duda. Se trata de una inflación que está acabando con el salario de los trabajadores. En consecuencia, una alta inflación se va a traducir en una devaluación. Yo reto al gobierno a que me desmienta que no va a devaluar; porque se trata de algo inevitable, y esto se decidirá después de las elecciones municipales. ¡Lo único que está seguro en Venezuela es una macrodevaluación, después de las elecciones municipales, que puede ser en diciembre o en los primeros días de enero.

Las divisas se vendieron en las subastas del Sicad entre diez y doce bolívares; hay economistas que dicen que esté será el nivel de la paridad cambiaria, una vez que el gobierno tome dicha decisión. ¿Qué piensa usted?

-Con la devaluación el dólar oficial se ubicará entre diez y doce bolívares. Ahí va a estar. Eso es inevitable, en vista de que la devaluación del mes de febrero, se la tragó la inflación. De manera que lo que viene para el 2014 no va a implicar el bienestar para la sociedad venezolana, en vista de que el gobierno sigue empeñado en una política económica, en la cual lo que está fallando es el modelo.

-Un modelo con una lógica pensada en la idea de que el Estado tiene que ser el dueño de los medios de producción, y ese Estado propietario es el que está causando la ruina de Venezuela; porque está acrecentando el déficit fiscal, y tiene que salir a pedir plata prestada; hay que pagar esa plata, y eso va a implicar una fuerte devaluación de bolívar.

Eso implica una situación de deterioro del salario real, mucho más pronunciada que lo que hemos visto hasta ahora, ¿o no?

-Te reitero: es inevitable la devaluación. El gobierno para el próximo año prepara otro paquetazo. Ese paquetazo tiene dos componentes importantes; uno, la nueva devaluación y, dos, el aumento de las tarifas eléctricas; que ya fue anunciado por Jesse Chacón. Entonces, esto se va a traducir en un aumento del costo de la vida, y esto en vista de que la devaluación en Venezuela, a diferencia de otros países, lo que hace es enriquecer al gobierno.

-Cuando en Colombia o en Perú el gobierno devalúa, quien se beneficia son los exportadores; que ahora reciben más moneda local, por el mismo dólar importado. Venezuela, la devaluación tiene un efecto contrario, y es que enriquece al Fisco, pero empobrece a los ciudadanos. Entonces, aquí la devaluación se convierte en un mecanismo, para sacarle plata a la gente, vendiéndole el dólar más caro.

-Ese nuevo paquetazo, que viene, va a significar una caída aún mucho más pronunciada del salario de los venezolanos, y que va a generar malestar social, en vista de que la gente no acepta que se le baje el sueldo; que es lo que significa la inflación.

A su regreso de China, el presidente Nicolás Maduro habló de una extensión del crédito chino. ¿Usted nos pudiera explicar en qué consiste este acuerdo?

-Esta extensión es una nueva hipoteca del país hacia los chinos. China se ha convertido en el gran financista de Venezuela; partiendo del hecho de que China ha diseñado hoy en día una estrategia, y que consiste en ubicar dónde están las materias primas fundamentales para su desarrollo, y como los chinos tienen grandes cantidades de reservas de dólares y de euros, las están prestando a muchos países a cambio de asegurarse el acceso a esa materia prima.

-Así, por ejemplo, los chinos nos están prestando montos cercanos a los 50 mil millones de dólares del total de 2008 para acá; pero tú tienes que pagarle a los chinos con petróleo. A los chinos tú no les pagas en efectivo, sino en especie, con despachos petroleros; de manera que los chinos se prepagan el préstamo a razón de 300 mil b/d; que salen a China, y de los cuales nosotros no cobramos, absolutamente, nada; porque están destinados a cubrir ese préstamo.

-Por otra parte, buena parte de los préstamos con China están atados a proyectos, que implican la compra de productos chinos: carros chinos, artículos electrodomésticos chinos. Entonces ese es un gran negocio para los chinos: prestarte, para que tú les compres sus productos. Por ejemplo, parte de ese dinero, que Maduro logró conseguir en China, y que ascendió a 5 mil millones de dólares, son para comprar 2 mil autobuses hechos en China; se compraron unas casas preconstruidas con productos, hechos en China, y con mano de obra china. De modo que el país asiático ha encontrado como un nuevo dorado en Venezuela, y este gobierno le ha abierto las puertas de par en par a una negociación inequitativa para Venezuela.

¿Entonces usted está de acuerdo con Douglas Bravo, quien señaló para la edición de La Razón de esta semana que “los convenios con China significan una nueva forma de colonialismo de Venezuela?

-En cierta medida estoy de acuerdo en que se trata de una forma de colonialismo; ya que con un precio petrolero a cien dólares el barril, Venezuela tendría que estar acumulando reservas internacionales; disfrutando de una posición holgada de sus reservas en su sector externo, y no lo tiene. Hoy en día se encuentra en la posición de pedir prestado, y va tener que seguir haciéndolo mucho más todavía; porque el dinero, con este ritmo de gastos no le va a alcanzar, y las cuentas están, totalmente, descuadradas.

-Ha encontrado en los chinos una especie de tabla de salvación; para no terminar de ahogarse el gobierno, y los chinos, conscientes de la debilidad de Venezuela, están prestos a seguir poniendo más dinero sobre la mesa a cambio de que les permitan acceso a materia prima, y, en particular, a más barriles de petróleo.

En cuanto a la producción de Pdvsa, ¿son reales las cifras que reporta el BCV?

-Ahí hay toda una discusión, acerca de esas cifras, porque muchos analistas, que usan fuentes internacionales han llegado a la conclusión de que las cifras del BCV están bien calculadas; que lo que no están bien son las cifras que Pdvsa le reporta al BCV.

Algunos economistas sostienen que Pdvsa sólo le entregó al BCV 46 mil millones de dólares, de 93 mil millones de dólares, que obtuvo como ingresos. ¿Adónde fue a parar el resto de dichos ingresos?

-Eso, solamente, lo sabe Rafael Ramírez. Más nadie sabe de eso en Venezuela. Eso es un misterio.