jueves, 13 de noviembre de 2014

EL PAPA Y LOS MOVIMIENTOS POPULARES

Declaración final Encuentro Mundial Movimientos Populares

 
 
 
 
 
 
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Minga Informativa de Movimientos Sociales
En el marco de la finalización del EMMP, queremos hacer llegar a la opinión pública un breve resumen de lo que sucedió durante estostres históricos días.
1. Convocado por el PCJP, la PAS y diversos movimientos populares del mundo bajo la inspiración del Papa Francisco una delegación de más de 100 dirigentes sociales de todos los continentes nos reunimos en Roma para debatir en base a tres ejes –tierra, trabajo, vivienda- los grandes problemas y desafíos que enfrenta la familia humana (especialmente exclusión, desigualdad, violencia y crisis ambiental) desde la perspectiva de los pobres y sus organizaciones.
2. Las jornadas se desarrollaron intentando practicar la Cultura del Encuentro e integrando compañeros, compañeras, hermanos y hermanas, de distintos continentes, generaciones, oficios, religiones, ideas y experiencias. Además de los sectores representativos de los tres ejes principales del encuentro, participaron un importante número de obispos y agentes pastorales, intelectuales y académicos, que contribuyeron significativamente al encuentro pero siempre respetando el protagonismo de los sectores y movimientos populares. El Encuentro no estuvo exento de tensiones que pudimos asumir colectivamente como hermanos.
3. En primer lugar, siempre desde la perspectiva de los pobres y los pueblos pobres, en este caso de los campesinos, trabajadores sin derechos y habitantes de barrios populares (villas, favelas, chabolas, slums), se analizaron las causas estructurales de la desigualdad y la exclusión, desde su raigambre sistémica global hasta sus expresiones locales. Se compartieron las cifras horrorosas de la desigualdad y la concentración de la riqueza en manos de un puado de megamillonarios. Los panelistas y oradores coincidieron en que debe buscarse en la naturaleza inequitativa y depredatoria del sistema capitalista que pone el lucro por encima del ser humano la raíz de los males sociales y ambientales. El enorme poder de las empresas trasnacionales que pretenden devorar y privatizarlo todo –mercancías, servicios, pensamiento- son primer violín de esta sinfonía de la destrucción.
4. Durante el trabajo en talleres se concluyó que el acceso pleno, estable, seguro e integral a la tierra, el trabajo y la vivienda constituyen derechos humanos inalienables, inherentes a las personas y su dignidad, que deben ser garantizados y respetados. La vivienda y el barrio como un espacio inviolable por Estados y corporaciones, la tierra como un bien común que debe ser compartido entre todos los que la trabajan evitando su acaparamiento y el trabajo digno como eje estructurador de un proyecto de vida fueron algunos de los reclamos compartidos.
5. También abordamos el problema de la violencia y la guerra, una guerra total o como dice Francisco, una tercera guerra mundial en cuotas. Sin perder de vista el carácter global de estos problemas, se trató con particular intensidad la situación en Medio Oriente, principalmente la agresión contra el pueblo palestino y kurdo. La violencia que desatan las mafias del narcoterrorismo, el tráfico de armas y la trata de personas fueron también objeto de profundo debate. Los desplazamientos forzados por la violencia, el agronegocio, la minería contaminante y todas las formas de extractivismo, y la represión sobre campesinos, pueblos originarios y afrodecendientes estuvieron presentes en todos los talleres. También el grave problema de los golpes de estado como en Honduras y Paraguay y el intervencionismo de grandes potencias sobre los países más pobres.
6. La cuestión ambiental estuvo presente en un rico intercambio entre la perspectiva académica y la popular. Pudimos conocer los datos más recientes sobre contaminación y cambio climático, las predicciones sobre futuros desastres naturales y las pruebas científicas de que el consumismo insaciable y la práctica de un industrialismo irresponsable que promueve el poder económico explica la catástrofe ecológica en ciernes. Debemos combatir la cultura del descarte y aunque sus causas son estructurales, nosotros también debemos promover un cambio desde abajo en los hábitos y conductas de nuestros pueblos priorizando los intercambios al interior de la economía popular y la recuperación de lo que este sistema deshecha.
7. Nuevamente, pudimos concluir que la guerra y la violencia, la agudización de los conflictos étnicos y la utilización de la religión para la legitimación de la violencia, así como la desforestación, el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad, tiene su principal motor en la búsqueda incesante del lucro y la pretensión criminal de subordinar a los pueblos más pobres para saquear sus riquezas naturales y humanas. Consideramos que la acción y las palabras de los movimientos populares y la Iglesia son imprescindibles para frenar este verdadero genocidio y terricidio.
8. Particular atención merece la situación de las mujeres particularmente golpeadas por este sistema. Reconocemos en esa realidad la urgente necesidad de un compromiso profundo y serio con esa causa justa e histórica de todas nuestras compañeras, motor de luchas, procesos y propuestas de vida, emancipatorias e inspiradoras. También exigimos la finalización de la estigmatización, descarte y abandono de los niños y jóvenes, especialmente los pobres, afrodecendientes y migrantes. Si los niños no tienen infancia, si los jóvenes no tienen proyecto, la Tierra no tiene futuro.
9. Lejos de regodearnos en la autocompasión y los lamentos por todas estas realidades destructoras, los movimientos populares, en particular los reunidos por este Encuentro, reivindicamos que los excluidos, los oprimidos, los pobres no resignados, organizados, podemos y debemos enfrentar con todas nuestras fuerzas la caótica situación a la que nos ha llevado este sistema. En ese sentido, se compartieron innumerables experiencias de trabajo, organización y lucha que han permitido la creación de millones de fuentes de trabajo digno en el sector popular de la economía, la recuperación de millones de hectáreas de tierra para la agricultura campesina y la construcción, integración, mejoramiento o defensa de millones de viviendas y comunidades urbanas en el mundo. La participación protagónica de los sectores populares en el marco de democracias secuestradas o directamente plutocracias es indispensable para las transformaciones que necesitamos.
10. Teniendo en cuenta el especial contexto de este encuentro y el invalorable aporte de la Iglesia Católica que en cabeza del Papa Francisco permitió su realización, nos detuvimos para analizar en el marco de nuestras realidades el imprescindible aporte de la doctrina social de la iglesia y el pensamiento de su pastor para la lucha por la justicia social. Nuestro material principal de trabajo fue la Evengelii Gaudium que se abordó teniendo en cuenta la necesidad de recuperar pautas éticas de conducta en la dimensión individual, grupal y social de la vida humana. Es dable desatacar la participación e intervención de numerosos sacerdotes y obispos católicos a lo largo de todo el Encuentro, viva encarnación de todos aquellos agentes pastorales laicos y consagrados, comprometidos con las luchas populares que, consideramos, deben ser reforzados en su importante labor.
11. Todos y todas, muchos de nosotros católicos, pudimos asistir a la celebración de una misa en la Catedral de San Pedro celebrada por uno de nuestros anfitriones el Cardenal Peter Turkson donde se presentaron como ofrendas tres símbolos de nuestros anhelos, carencias y luchas: un carro de cartoneros, frutos de la tierra campesina y una maqueta de una casilla típica de los barrios pobres. Contamos con la presencia de un importante número de obispos de todos los continentes.
12. En este ambiente de debate apasionado y fraternidad intercultural, tuvimos la inolvidable oportunidad de asistir a un momento histórico: la participación del Papa Francisco en nuestro Encuentro que sintetizó en su discurso gran parte de nuestra realidad, nuestras denuncias y nuestras propuestas. La claridad y contundencia de sus palabras no admiten dobles interpretaciones y reafirman que la preocupación por los pobres está en el centro mismo del Evangelio. En coherencia con sus palabras, la actitud fraterna, paciente y cálida de Francisco con todos y cada uno de nosotros, en especial con los perseguidos, también expresa su solidaridad con nuestra lucha tantas veces desvalorizada y prejuzgada, incluso perseguida, reprimida o criminalizada.
13. Otro de los momentos importantes fue la participación del hermano Evo Morales, presidente de la Asamblea Mundial de los Pueblos Indígenas, que participó en carácter de dirigente popular y nos ofreció una exposición centrada en la crítica al sistema capitalista y en todo lo que podemos hacer los excluidos en términos de tierra, trabajo, vivienda, paz y ambiente cuando nos organizamos y logramos acceder a posiciones de poder, pero de un poder entendido como servicio y no como privilegio. Su abrazo con Francisco nos emocionó y quedará por siempre en nuestra memoria.
14. Entre los productos inmediatos del encuentro, nos llevamos dos cosas: la “Carta de los excluidos a los excluidos” para trabajar con las bases de los sectores y movimientos populares, la cual nos comprometemos a distribuir masivamente junto al Discurso del Papa Francisco y las memorias; y la propuesta de crear un Espacio de Interlocución permanente entre los movimientos populares y la Iglesia.
15. Junto a este breve comunicado, le pedimos especialmente a todos los trabajadores y trabajadoras de prensa que nos ayuden a difundir la versión completa del discurso del Papa Francisco que, repetimos, sintetiza gran parte de nuestra experiencia, pensamiento y anhelos. Repitamos junto al: ¡Tierra, Techo y Trabajo son derechos sagrados! ¡Ningún trabajador sin derechos! ¡Ninguna familia sin viviendas! ¡Ningún campesino sin tierra! ¡Ningún pueblo sin territorio! ¡Arriba los pobres que se organizan y luchan por una alternativa humana a la globalización excluyente! ¡Larga vida al Papa Francisco y su Iglesia pobre para los pobres!

EL PAPA Y LOS DERECHOS DE LOS MÁS HUMILDES.

Papa Francisco: “Reclamar tierra, techo y trabajo no es comunista, es la doctrina social de la Iglesia”

“¡Ninguna familia sin vivienda! ¡Ningún campesino sin tierra! ¡Ningún trabajador sin derechos!”movimiento popular
Ustedes no trabajan con ideas, trabajan con realidades como las que mencioné y muchas otras que me han contado… tienen los pies en el barro y las manos en la carne. ¡Tienen olor a barrio, a pueblo, a lucha!
El Papa Francisco pidió hoy tierra para los campesinos, casas para las familias y derechos para los trabajadores durante el Encuentro Mundial de los Movimientos Populares, en el que participa el presidente de Bolivia, Evo Morales.
“Este encuentro nuestro responde a un anhelo muy concreto, algo que cualquier padre, cualquier madre quiere para sus hijos; un anhelo que debería estar al alcance de todos, pero hoy vemos con tristeza cada vez más lejos de la mayoría: tierra, techo y trabajo”, afirmó el pontífice.
Es extraño pero si hablo de esto para algunos resulta que el papa es comunista“, añadió. “No se entiende que el amor a los pobres está al centro del Evangelio. Tierra, techo y trabajo, eso por lo que ustedes luchan, son derechos sagrados. Reclamar esto no es nada raro, es la doctrina social de la Iglesia“.
El Encuentro Mundial de Movimientos Populares “no responde a una ideología”, destacó el papa argentino. “Ustedes no trabajan con ideas, trabajan con realidades (…) tienen los pies en el barro y las manos en la carne. ¡Tienen olor a barrio, a pueblo, a lucha! Queremos que se escuche su voz que, en general, se escucha poco”.
“Jesús les diría hipócritas” a los que abordan “el escándalo de la pobreza promoviendo estrategias de contención que únicamente tranquilicen y conviertan a los pobres en seres domesticados e inofensivos”, señaló el líder de la Iglesia católica.
“Ustedes sienten que los pobres ya no esperan y quieren ser protagonistas, se organizan, estudian, trabajan, reclaman y sobre todo practican esa solidaridad tan especial que existe entre los que sufren, entre los pobres y que nuestra civilización parece haber olvidado”.
“Digamos juntos desde el corazón: ¡Ninguna familia sin vivienda! ¡Ningún campesino sin tierra! ¡Ningún trabajador sin derechos! ¡Ninguna persona sin la dignidad que da el trabajo!”, exhortó Jorge Bergoglio.
El Papa regaló además a los presentes rosarios fabricados por artesanos, cartoneros y trabajadores de la economía popular de América Latina.

VENEZUELA: EXTRACTIVISMO Y ECOCIDIO.

Extractivismo en Venezuela se hace sin estudios ambientales ni consulta a comunidades indígenas

 
 
 
 
 
 
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MINERIAVENEZUELALa palabra extractivismo no aparece en el Diccionario de la Real Academia Española, pero su uso, frecuente en temas económicos, de desarrollo y de ambiente, apunta a un modelo de rentabilidad basado -como su nombre lo indica- en la extracción de recursos del suelo.
Esta puede ser una definición general del término, pero si se habla del contexto actual del extractivismo en Venezuela, alfa y omega de su desarrollo y sustento, las nociones van mucho más allá de un concepto escueto.
En un informe presentado ante Naciones Unidas, la organización no gubernamental Laboratorio de Paz no solo recordó la importancia de la extracción petrolera para Venezuela y las metas propuestas para el “Plan de la Patria 2013-2019”, sino que además concluyó que la explotación de nuevos yacimientos petroleros y la conformación de empresas mixtas para tales fines se viene haciendo “sin cumplir los requisitos establecidos en la Constitución Nacional”.
Verbigracia está la realización y difusión de estudios de impacto ambiental, como queda sentado en el artículo 129 de la Carta Magna; además del incumplimiento de la consulta previa, libre e informada, a los pueblos y comunidades indígenas afectadas. Esto según el 120 de la Constitución.
Otro de los derechos afectados por la expansión de la economía extractivista ha sido la demarcación y entrega de títulos colectivos de tierras indígenas, como lo establece el 119 de la ley citada.
“El propio texto constitucional, en su disposición transitoria decimosegunda, estableció un plazo de 2 años para la demarcación de hábitat indígena, sin embargo, 15 años después apenas se ha demarcado menos del 5% del total de territorios indígenas en el país. En opinión de la ONG Provea, la profundización de una economía de tipo extractiva en el país se realiza sin la atenuación de los impactos sociales y ambientales que genera”, reza el informe.
Retroceso administrativo
Además del desplazamiento de pueblos indígenas a manos del Estado que se deriva de la falta de delimitación de sus tierras, Laboratorio de Paz también llama la atención sobre el retraso en políticas ambientales y el debilitamiento de las instituciones correspondientes. En este caso se refieren específicamente al extinto Ministerio del Ambiente, cuyas funciones hoy se diluyen en el recién Ministerio de la Vivienda, el Hábitat y el Ecosocialismo.
“En opinión de la Red de Organizaciones Ambientales No Gubernamentales de Venezuela (Red ARA) esta decisión será un retroceso en materia de políticas e institucionalidad ambiental, y es incongruente con los principios de desarrollo sustentable y derechos ambientales establecidos en nuestra Constitución. El debilitamiento institucional del órgano encargado de la ejecución de políticas ambientales en el país significará menos posibilidades de monitorear y establecer correctivos a las consecuencias negativas del extractivismo en Venezuela”, recoge el trabajo de Laboratorio de Paz.
Ecocidio minero
La publicación también guarda un apartado sobre la actividad minera en áreas protegidas, donde se señala el caso del Parque Nacional Canaima, en la Gran Sabana. Ahí se reseña las denuncias de las mujeres pemonas de la zona, quienes señalaron a mineros ilegales de contratar a miembros de su tribu para esta práctica prohibida en esos espacios por ser declarado Patrimonio de la Humanidad.
Esa actividad, señala Laboratorio de Paz, se ha traducido en el aumento de la deserción escolar, el alcoholismo, abandono de actividades tradicionales, enfermedades “y otros padecimientos como consecuencia de la progresiva incorporación de indígenas a la extracción de minerales. Las mujeres han sido víctimas de amenazas y hostigamientos debido a sus denuncias”.
De “garimpeiros” y guerrillas
Pero las irregularidades en el extractivismo criollo no vienen solo de mineros ilegales y de militares incursos en este tipo de actividades, sino también de grupo guerrilleros que actúan en la Amazonia venezolana conjuntamente con buscadores de oro y piedras preciosas del Brasil: los comúnmente conocidos “garimpeiros”. Esto es lo que recoge el informe sobre el caso:
“La Coiam (coordinadora de organizaciones indígenas de la Amazonia venezolana) ha denunciado que “garimpeiros” ilegales provenientes de Brasil, junto a grupos irregulares de la guerrilla colombiana así como venezolanos, practican la minería ilegal destruyendo una de las zonas de mayor biodiversidad del mundo en busca de oro, diamantes y coltán. Survival International, calcula que hasta 4.000 mineros ilegales -o garimpeiros- actúan en la zona. El gobernador del estado indígena de la etnia Baniva afirmó que la explotación ilegal de oro se hace de alguna manera con el beneplácito de las Fuerzas Armadas. Cuando los indígenas se quejan, inmediatamente son reprimidos. La deforestación a causa de la minería ilegal en la amazonia venezolana se estima en 1.100 km2 al año”.
De ahí que la organización no gubernamental proponga las siguientes recomendaciones en su publicación:
- Realizar estudios transparentes de impacto ambiental para medir el grado de contaminación generada por la actividad extractiva en territorios indígenas, haciendo público sus resultados como base para el ejercicio del derecho a la consulta previa, libre e informada de las comunidades originarias de los proyectos a desarrollarse en su territorio.
- Avanzar en los procesos de demarcación de territorios indígenas, tal como lo establece la CRBV y la Ley Orgánica de Pueblos y Comunidades Indígenas (Lopci).
- Revertir la militarización del territorio wayuu derogando la creación del Distrito Militar número 1, investigando y sancionando las denuncias de violación al derecho a la vida, integridad personal y libertad personal realizadas por las organizaciones indígenas de la Guajira venezolana.
- Dar cumplimiento pleno al artículo 119 de la CRBV que establece el reconocimiento de las organizaciones sociales, políticas y económicas tradicionales de los pueblos y comunidades indígenas.
- Reconsideración de la fusión del Ministerio del Ambiente con el Ministerio de Vivienda, otorgándole el presupuesto e independencia necesarios para el cumplimiento de su labor de preservación de la naturaleza.
- Establecer canales democráticos de participación, sin exclusión por razones políticas o ideológicas, para las diferentes organizaciones indígenas, ambientales y de derechos humanos para el diseño de políticas públicas que disminuyan los efectos negativos de la economía extractiva en el país. (Correo del Caroní, 01.11.2014)

VENEZUELA: DE SINDICATOS A MILICIAS

De sindicatos y milicias

by PolitiKa UCAB
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Mercedes Martelo  / 06 de noviembre de 2014
El llamado primer contrato colectivo socialista de los servidores de la patria entró en discusión formalmente a partir de esta semana. El patrono “Estado” y los ¿representantes sindicales? Analizarán, aparte de condiciones laborales clásicas, una propuesta espeluznante: la creación de milicias de empleados públicos.
La contratación colectiva se supone un instrumento legal para organizar las condiciones de trabajo en el ámbito de un sector laboral de manera que no haya diferencias extremas entre trabajadores similares de diferentes empresas u organizaciones. Representantes de las partes (trabajadores y patronos) negocian hasta acordar las condiciones que resultan convenientes y sustentables. Los trabajadores buscan no solo mejoras en las remuneraciones, sino también apoyo en servicios médicos, recreativos, educativos. Los patronos buscan satisfacer las solicitudes de los trabajadores sin que ello signifique afectar la viabilidad de la organización. La negociación debe resultar en un acuerdo que ampara a todos los trabajadores del sector por un tiempo determinado, luego del cual volverá a revisarse.
En el transcurso de la evolución del capitalismo, los trabajadores aprendieron que a estas negociaciones resultaba más conveniente presentarse organizados en estructuras que reciben el nombre de sindicatos (Drae: asociación de trabajadores constituida para la defensa y promoción de intereses profesionales, económicos o sociales de sus miembros).
Cuando el patrono es el Estado, la negociación es más compleja porque entran en juego nuevos niveles de intereses que involucran a toda la sociedad, no obstante, en una sociedad ‘normal’ se trataría de una negociación en la cual los trabajadores buscan mejoras en sus condiciones laborales y el Estado busca llegar hasta un nivel sustentable de satisfacción en el marco de una negociación que reflejaría las condiciones de las fuerzas políticas en un momento dado.
Pero en Venezuela no estamos en una sociedad normal, no vivimos un tiempo normal sino un tiempo de confusión, de altos niveles de entropía. Aún así, no podemos menos que considerar como extraordinariamente anormal que sean los mismos trabajadores quienes busquen perder su condición de tales para convertirse en milicianos o soldados, que al cabo es lo mismo, hipotecando sus derechos laborales alcanzados luego de grandes esfuerzos en todo el mundo, en aras de la defensa del patrono, bueno, mejor dicho, de la defensa de una élite militarista enquistada en el poder. Esto es lo que está sobre el tapete, desde que las federaciones de empleados públicos y trabajadores del sector público, Fedeunep y Fentrasep, presentaron a consideración del Ejecutivo Nacional, su propuesta de contrato marco de la administración pública.
01La propuesta establece, según se ha anunciado, en su cláusula número seis, que dichas federaciones de trabajadores públicos junto con sus sindicatos afiliados, constituirán las milicias obreras. Estas instancias organizativas representarían una consolidación de la unidad cívico-militar como recurso para fortalecer el poder defensivo nacional.
¿De dónde sacan estos pretendidos sindicalistas que los millones de servidores públicos, entre quienes se encuentran sufridas mujeres cabeza de familia que deben garantizar el sustento de sus hijos, quieren ser soldados? No importa cuánto se quiera disimular o disfrazar el carácter de miliciano, se trata de servicio militar, se trata de tropa o gente de guerra.
Frente a esta propuesta, y en virtud de la condición de subordinación de los soldados que todos conocemos, ya no importa nada cuáles sean las reivindicaciones planteadas en el marco del contrato colectivo que se pretende discutir. ¿Quién ha visto soldado discutiendo con su jefe una orden, o protestando por condiciones de trabajo ‘inadecuadas’?, ¿quién ha visto un soldado en huelga?, ¿acaso no conocen el principio de obediencia debida esos señores que se dicen representantes de los trabajadores?
Los soldados no son trabajadores, son soldados, y como tales se les hacen unas exigencias que no nos compete discutir aquí. Los trabajadores no son soldados y no tienen por qué serlo a menos que se decrete una condición de emergencia nacional o una guerra de verdad (no psicológica).
Los trabajadores del sector público en Venezuela están viviendo una hora menguada, la élite militarista gobernante ha eliminado el valor del conocimiento y el mérito para el trabajo en el servicio público, ya no se exige la preparación adecuada ni se busca el compromiso de servicio ciudadano, sino la sumisión a la doctrina, al jefe, como en los tiempos de Gómez, ¡quién lo diría!, aunque más bien peor porque en ese tiempo era sólo la sumisión al jefe.
Los trabajadores del sector público en Venezuela, todos los trabajadores, en realidad todo el país, requiere urgentemente una coalición de fuerzas democráticas que ponga freno a la destrucción de nuestra sociedad.

DIEZ LECCIONES PARA QUE UN PAÍS TENGA EXITO

Diez lecciones para que un país tenga éxito en un mundo globalizado

Publicado el 4 de noviembre, 2014 | 0 comentarios | Archivado en : 
Foto: Alice - Flickr bajo licencia CC.
Foto: Alice – Flickr bajo licencia CC.
Hace 18 años, bajo el liderazgo del entonces Comisionado Presidencial para la Modernización del Estado de El Salvador, Alfredo Mena Lagos, se organizaron dos viajes al sudeste asiático, que contaron con una nutrida participación de representantes de diversos sectores de la vida nacional.
El propósito era conocer de primera mano qué es lo que habían hecho o estaban haciendo esos países para avanzar tan rápido en materia de crecimiento y desarrollo, a tal punto que algunos de ellos eran ya considerados como “milagros económicos”. Debido a que en El Salvador para entonces también reinaba un fuerte optimismo resultante de las altas tasas de crecimiento que se habían registrado en el primer quinquenio de la década de los noventa, la expectativa era que como grupo sacáramos algunas lecciones del éxito de los países visitados y evaluar si las podíamos reproducir en nuestro país.
El itinerario del segundo grupo, entre quienes estaba el actual Presidente de la República, incluyó además de Malasia y Singapur en el sudeste asiático, a Nueva Zelanda.
La agenda desarrollada en cada país fue intensa y de muy alto nivel. Se conversó con líderes políticos, funcionarios y técnicos de alto nivel, empresarios, académicos, trabajadores, predominando en todos un ambiente de mucha confianza y optimismo sobre el futuro de sus países.
Revisando viejos archivos me encontré un pequeño reporte que hice sobre ese viaje, en el identificaba las “Diez lecciones para que un país tenga éxito en un mundo globalizado” que se exponen a continuación:
1. Que el gobierno debe guiarse por un número reducido de objetivos. Para que el gobierno sea eficaz en lo que hace, debe de concentrarse en pocas cosas, ya que cuando todo es prioritario nada es prioritario. En el caso de Singapur nos decían que los objetivos prioritarios que ellos seleccionaron en la época del despegue fueron tres: que todo  mundo tuviera vivienda, que todo mundo tuviera empleo formal y que los precios aumentaran menos que los salarios en un contexto de estabilidad monetaria. Una vez alcanzados, fueron sustituidos por otros.
2. Que para lograr esos objetivos, las variables claves eran el ahorro y la inversión, las cuales había que elevar idealmente a través de políticas públicas por encima del 25% del PIB. En el caso de los países asiáticos la elevación de esas tasas se hizo más a través de políticas de ahorro programado y de atracción de inversión extranjera, que de aumento en los impuestos.
3. Aprovechar los posibles factores generadores de ventajas competitivas disponibles, entre los que se mencionaron temas como la ubicación geográfica, la concentración de gente laboriosa susceptible de ser formada y capacitada, los cuales justamente también caracterizan a El Salvador.
4. Contar con una visión de futuro ampliamente compartida, capaz de mantener vivo el optimismo y de facilitar la construcción de consensos.
5. Contar con un aparato estatal con la capacidad de modificar continuamente sus funciones y estructuras en función de los cambios permanentes en el entorno.
6. Identificar y promover las características que deben tener los actores clave del desarrollo: a) líderes políticos visionarios y honestos; b) empresarios convencidos de la necesidad inminente de prepararse para participar en mercados más competitivos; c) trabajadoresconscientes de que la única manera realista de aumentar de manera sostenida el poder adquisitivo de su salario es aumentando la productividad y disminuyendo el desempleo y el subempleo; d) burócratas estables y adecuadamente remunerados, pero reclutados con base a méritos y competencias y provistos de una cultura de servicio público; y d) una ciudadaníaactiva que participa en los diferentes aspectos que afectan sus vidas, que exige rendición de cuentas y que asume la búsqueda de su bienestar y el bien común como proyecto de vida.
7. Estar convencido de que la estabilidad macroeconómica no se puede sacrificar por ningún motivo, para lo cual es indispensable contar con pactos políticos que contribuyan a establecer un clima de disciplina fiscal, altas tasas de ahorro doméstico y autoridades monetarias independientes.
8. Concertar políticas de Estado en áreas clave que contribuyan a crear un clima de negocios con reglas claras y estables.
9. Desarrollar rasgos de carácter a nivel individual y colectivo que fortalezcan la autonomía y autoestima de la población, mediante la promoción de una cultura de trabajo y excelencia.
10. Reconocer que la competitividad de un país depende del desempeño en áreas clave como la salud, la educación, agua, la ciencia y la tecnología, la infraestructura portuaria y aeroportuaria, el sistema financiero, las telecomunicaciones, los caminos y carreteras. Tolerar privaciones e ineficiencias en esos sectores no solo aumenta los costos de producir en el país y disminuye la productividad del trabajo, sino también comprometen su desarrollo futuro.

lunes, 10 de noviembre de 2014

CABUDARE: ¿UNA POBLACIÓN CON IDENTIDAD O IDENTIFICACIÓN CULTURAL EN CONSTRUCCIÓN?
El desarrollo de la modernidad  y con ello todo su impacto económico y demográfico que genera va conquistando espacios donde antes la cultura con tradiciones y costumbres campesinas habían logrado una identidad cultural o al menos una clara identificación cultural.
El proceso de urbanismo que acompaña a esta modernidad trae cambios culturales en los pueblos de tradición campesina ligada fundamentalmente a la producción agrícola y pecuaria. En dichos pueblos se había logrado desarrollar un conjunto de tradiciones, costumbres, saberes, formas de producción, relaciones de producción, expresiones artísticas y creencias que de alguna manera proporcionaban un perfil cultural que permitía distinguir a un pueblo de otro o por lo menos categorizarlos en una línea común con otros pueblos de semejantes características, se entiende que  los elementos culturales desarrollados configurarían  la identidad cultural de esos espacios humanos y de ser el caso se delinearía una perspectiva cultural que conllevaría sino a una identidad sí a una identificación con otros pueblos, pero que dichas identificación al hacerse propia por ese conglomerado de alguna manera serviría para distinguirlo de otros espacios.
El famoso Jabillo o Ceiba de Cabudare
Este proceso del impacto urbanístico en la cultura tradicional de los pueblos es propio de la concentración de las estructuras económicas  capitalistas que de manera desordenada y bajo un criterio de desarrollo desigual de la producción invaden espacios que antes estaban dedicados a las actividades económicas propias del campo. Si bien estas actividades también se encuentran enmarcadas dentro del modo de producción capitalista se debe tener claridad que las mismas producían un modo de vida, un estilo de vida con sus respectivas cosmovisiones las cuales a su vez lograban darle expresión a un conjunto de tradiciones y costumbres, saberes y creencias muy distintas a las localizadas en los espacios propiamente urbanos y caracterizados desde el punto de vista económico por el crecimiento industrial y comercial.
Es posible que este sea el caso  del pueblo de Cabudare, capital del municipio Palavecino del Estado Lara, el cual desde la década de los años ochenta (80) del siglo pasado ha sido sometido a un acelerado crecimiento urbano y poblacional catalogado como el de mayor intensidad en América Latina. Este municipio según cifras encontradas en la página web del Instituto Nacional de Estadísticas, tenia para el año 1981 una población de 59.096 y para el 2011 se proyectó una cifra de 166.087 habitantes, lo cual indica que en tres décadas triplicó su población.
El origen de esta nueva población viene tanto de la ciudad de Barquisimeto, en su gran mayoría, como del centro de Venezuela sobre todo de Caracas, Maracay y Valencia. Esta población llegada al municipio Palavecino es de suponer que  tiene una composición cultural, en cuanto a tradiciones y costumbres, distintas a las ya encontradas en el pueblo receptor, así mismo posee características profesionales y económicas diferenciadas.
El primer problema de naturaleza cultural que encontramos como consecuencia del crecimiento poblacional producto del crecimiento inmobiliario, es que los llamados nuevos habitantes se van a concentrar en áreas geográficas separadas de la población tradicional observándose, sobre todo en la primera década del nuevo poblamiento, la inexistencia de relaciones de todo tipo entre la población tradicional y los nuevos habitantes. La población llegada de otras tierras se concentro en una sola parroquia (en la primera década 1980-1990), a saber la parroquia José Gregorio Bastidas, ubicada en la parte noreste del municipio, igualmente siguió el crecimiento inmobiliario y urbano entre el 1990-2000 con la misma tendencia de separación entre las poblaciones tradicionales y los de nuevo arraigo.
Entre tanto en la población tradicional se fue paulatinamente desarrollando una serie de características que van desde la transición de sus costumbres y tradiciones semicampesinas a una cultura netamente urbana hasta la concentración de los habitantes tradicionales, producto del crecimiento vegetativo,  en barrios y localidades bien diferenciadas de los nuevos poblados. Así, mientras se construían grandes cantidades de urbanizaciones para albergar a familias venidas de Barquisimeto o del centro del país paralelamente iban también construyéndose barrios y urbanizaciones populares donde se ubicarían los pobladores tradicionales como también los venidos de otros municipios , fundamentalmente del municipio Moran, Torres y Jiménez. Estos nuevos habitantes (de los municipios foráneos) venían a engrosar a la población tradicional pero con la característica que tampoco tendrían relaciones económicas, sociales o culturales con los otros nuevos habitantes apostados en las llamadas nuevas urbanizaciones.
Todo ello trajo como consecuencia que la población tradicional, con sus costumbres, tradiciones, creencias y saberes, en poco tiempo fue quedando ubicada en centros urbanos bien localizados y en una especie de marginalidad cultural, se agrava aún más la situación dado que en  los habitantes de la nuevas urbanizaciones no se observa (por lo menos en las primeras dos décadas de este crecimiento inmobiliario) interés alguno por tener algún acercamiento cultural con los pobladores tradicionales, lo cual se tradujo ,por una parte que la identidad cultural o en todo caso la identificación cultural que seguramente tenían los habitantes tradicionales fue disminuyendo su presencia y su importancia pero tampoco los nuevos habitantes (sobre todo de las nuevas urbanizaciones)lograban expresar socialmente sus características culturales. Todo ello contribuyó para que entre la década de los noventas y los primeros años de este siglo se señalara las características generales de la existencia de dos Cabudare, el Cabudare nuevo y el viejo, con una escasa comunicación económica, social o  cultural, dos pueblos viviendo en una misma área geográfica pero sin reconocerse.
Ahora bien, las investigaciones históricas realizadas recientemente sobre Cabudare muestran que esta población se ha venido consolidando a través de distintos poblamientos, es decir, no fue un pueblo fundado de la manera tradicional como se conoce el origen de muchas poblaciones, sino que se fue construyendo, tejiendo su historia en la medida que su quehacer económico iba en crecimiento. De allí que se hable del último y definitivo poblamiento en la segunda década del siglo XIX.
La actividad agrícola del poblado de Cabudare produjo otras oleadas migratorias venidas principalmente de El Tocuyo y de las tierras del municipio Torres, el cual le dio a las tierras de Cabudare su perfil cultural definitivo y eso tiene que ver con el arraigamiento de tradiciones, creencias y saberes tales como el tamunangue, el juego del garrote, velorios de la cruz de mayo, fiesta de los días de reyes, fiesta a San Antonio y muchas otras manifestaciones religiosas y musicales que junto a la actividad agrícola dedicada a la producción de caña de azúcar, aguardiente y papelón configuraron el perfil cultural del Cabudare de las décadas de los años treinta(30), cuarenta(40) y cincuenta(50) del siglo pasado hasta la llegada de la última oleada migratoria que se produce a partir de la década de los años ochenta(80) del siglo pasado y que aún se mantiene.
La breve descripción hecha anteriormente plantea el problema cultural de Cabudare de manera compleja puesto pareciera que se trata de un desarrollo cultural en plena construcción o reconstrucción, se trata de entender cuál ha sido el papel de la distintas oleadas migratorias en la composición del perfil cultural del Cabudareño, se plantea la pregunta de si realmente existe una identidad cultural que distinga a Cabudare de otros pueblos o si realmente lo que existe es un proceso de identificación cultural con otros lugares. También surge la pregunta acerca del impacto del desarrollo inmobiliario (y con él la llegada de miles de habitantes venidos de otras tierras distintas a las larenses) en la cultura cabudareña, como se relacionan esas personas con las tradiciones y costumbres encontradas, como influyen en ellas, como se encuentran, cual es la conducta del cabudareño tradicional ante la llegada de estas migraciones que traen otros modos de vida, otras costumbres. ¿Acaso se desarrolla un proceso de transculturación con la llegada de los nuevos habitantes?, ¿porqué se relegan las tradiciones y costumbres tradicionales? ¿Qué ocurre con la memoria histórica del cabudareño?
Como hemos visto, se trata de estudiar un espacio geohumano que se caracteriza por una complejidad cultural producto del encuentro de distintas personas de distintas costumbres, tradiciones y lugares, hecho que ocurre en otras partes de América Latina donde el crecimiento urbano acelerado da lugar a este tipo de situaciones culturales.
Se trata, entonces, de abordar el estudio del desarrollo cultural no solo de Cabudare sino de otros pueblos de América Latina desde una perspectiva histórica concreta que de cómo resultado la comprensión de los hechos culturales con el mayor acercamiento posible a nuestras realidades.

domingo, 9 de noviembre de 2014

DIFERENCIA ENTRE PROGRESISMO Y SOCIALISMO


DIFERENCIA ENTRE PROGRESISMO DEL SIGLO XXI Y EL SOCIALISMO TOTALITARIO DEL SIGLO XXI.


PROGRESISMO
(Constitución de 1999)
Socialismo: ESTADO COMUNAL
(Leyes Comunales)
Socialismo: ESTADO TOTALITARIO
(Fascismo y Comunismo)
-Estado democrático y social de derecho y de justicia
-Poder absoluto del Estado sobre el ciudadano.
-Supeditación del ciudadano al Estado.
-Pluralismo político.

-Una sola visión del mundo, de la sociedad y del hombre.
-El Estado domina la vida pública y privada.
-Estado federal descentralizado.
-Ética socialista.
-Líder único con poder absoluto.
-Gobierno democrático, participativo, electivo, descentralizado, alternativo y pluralista.
-Estado centralizado.
-Fusión de Estado , Partido y FANB
-Libertad económica.
-Planificación económica centralizada.
-Culto a la personalidad de carácter semi religioso.
-Promoción de la iniciativa privada.
-No hay libertad económica.
--Planificación económica  centralizada.
-Se garantiza el derecho de propiedad.
-Se promueve un solo tipo de propiedad: la propiedad social.
-Una sola visión del mundo, de la sociedad y del hombre.
-Derecho al uso, goce, disfrute y disposición de bienes.
-No hay disposición de bienes.
-La violencia como instrumento del cambio social.
-No hay confiscación de bienes.
-Se crea el espacio socialista: comunas, ciudades socialistas y distritos motores.
-Segregación política y social.
-La familia es la célula fundamental de la sociedad democrática.
-La comuna es la célula fundamental del Estado comunal.
-No hay libertad económica.
-Las relaciones sociales se fundamentan en la gobernabilidad democrática.
-Se eliminan los gobiernos electivos, descentralizados, alternativos y pluralistas.
-No hay disposición de bienes.
-El consenso es el instrumento del cambio social.
-Se desarrolla solo el modelo productivo socialista.
-Se eliminan los gobiernos electivos, pluralistas, y alternativos.
-Empoderamiento ciudadano
-Las comunas se convierten en instrumentos ejecutores del poder central.
-Militarización de la sociedad civil.
-Creación de grupos paramilitares (colectivos)
Gestión basada en: Eficiencia, transparencia y participación.
-Se instrumenta el trueque y la moneda comunal.
-Relación directa líder-masas.

-Todas las comunas pertenecen a un distrito motor con autoridad única designada por el poder central.
-No hay libertad de pensamiento ni de expresión.
-Hegemonía y dominación de la información y la comunicación

-El Banco Comunal solo financia al modelo de propiedad social.
-Confiscación de bienes.

-Poder popular secuestrado.