viernes, 18 de julio de 2014

VENEZUELA: DEL "PRESIDENTE OBRERO" A LOS EMPLEADOS PÚBLICOS.

Un regalo del “Presidente Obrero” a los trabajadores públicos

Como ya es común en la propaganda del Gobierno, tales anuncios son una nueva burla y un engaño monstruoso hacia los millones de empleados y trabajadores públicos.
Como ya es común en la propaganda del Gobierno, tales anuncios son una nueva burla y un engaño monstruoso hacia los millones de empleados y trabajadores públicos.

El “chavismo crítico” aún no entiende o no le conviene entender que Chávez siempre fue un caudillo al servicio del capital

Pablo Hernández Parra
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Pablo_Hernandez_Parra_1El Sr. Nicolás Maduro como Presidente de Venezuela es legalmente el patrón de más de dos millones de trabajadores  al servicio del Estado venezolano. El viernes pasado el gobierno anunció a los cuatro vientos: “Aprueban aumento de sueldo a funcionarios y obreros públicos”.
Como ya es común en la propaganda del Gobierno, fundada en la manipulación de cifras, la mentira pura y simple, y el ocultamiento de información, tales anuncios son una nueva burla y un engaño monstruoso hacia los millones de empleados y trabajadores públicos. La nueva escala de sueldos y salarios publicados se aprecia en el siguiente cuadro[1]:
Venezuela_aumento_salarios_publicos_2014
¿Qué significa esta tabla y cuáles son las consecuencias para los trabajadores públicos?
En esta semana diversos voceros del Gobierno y del sector privado han anunciado la inminencia de la unificación cambiaria, como condición sine qua non impuesta por la banca internacional para refinanciar la deuda externa, cuyo monto principal para el presente año el gobierno debe cancelar para los meses de septiembre-octubre. Y como ya es de conocimiento público, el Gobierno no tiene los dólares para cumplir con semejante compromiso.
Hasta hoy las posibles tasas de unificación propuestas giran en establecer la tasa de cambio a 25-30 BsF. /$ propuesta por sectores del gobierno[2] y asomada por el banco inglés Barclays. Otra propuesta es elevarla a nivel de SICAD II 50 BsF. /$[3] y la aspiración de los banqueros internacionales de que la unificación se establezca en 70 BsF. /$.
La implantación generalizada que se ha hecho del SICAD II para la mayoría de las transacciones de importación, viajes, etc., no deja lugar a dudas de que la unificación apunta a tener esa base mínima. Sin embargo, la banca internacional considera que unificar a ese nivel, manteniendo el dólar paralelo, es mantener y estimular la corrupción. En todo caso, cualquiera que sea la medida que se tome ella constituirá la legalización de la mega devaluación que ya está en marcha en Venezuela desde marzo del 2013 cuando el dólar paralelo se disparó de 22,80 BsF. /$ a 87,71 en febrero del presente año. En ese sentido comparemos el “alza” salarial anunciada por el Gobierno con las tasas de cambio posible una vez establecida la unificación cambiaria y veamos cual es la realidad del aumento prometido.
Venezuela_salarios_vs_tasas_2014

En cualquiera de las variantes de la unificación cambiaria propuestas, pero especialmente al nivel del SICAD II que ya está en marcha, la conclusión es clara y categórica: Reducción brutal del costo de la mano de obra venezolana en beneficio del capital financiero[4]. De 738,09 $/Mes a BsF 6,30 según la tasa oficial que el gobierno usa con fines de engaño y manipulación a 93 $/Mes[5], lo que equivale a 3,10 $/hora. De cumplirse la posición de la banca y unificar a BsF 70, además de lo catastrófico que sería para el trabajador venezolano, que lo colocaría en condiciones de semi esclavitud asalariada, podría colocar la rebelión popular en el orden del día que, en definitiva, es el verdadero enemigo y temor que unen a Gobierno y oposición.
Los trabajadores públicos deben adquirir conciencia de que esta devaluación coloca el costo de su fuerza de trabajo a los niveles del trabajador de China, la India y Pakistán, cuyos salarios giran en torno a los 2 a 3 $/día. Mientras tanto, en el Imperio el presidente Obama acaba de decretar el salario mínimo en 10 dólares la hora[6]. El descaro y el cinismo con que actúa este Gobierno contra la población trabajadora no conocen límites, ni se para en escrúpulo alguno, incluyendo la burla y desprecio hacia su propia base de apoyo como es una parte importante de los trabajadores a su servicio.
Abaratar la mano de obra, reducir el gasto social, aumento general en los precios de alimentos, medicina, repuestos, tarifa de servicios públicos, privatizar el yacimiento petrolero, tal es el verdadero legado que Chávez le dejó a los trabajadores y que el dúo Maduro-Cabello cumplen con absoluta fidelidad, pese a las quejas gritos y lamentos del “chavismo crítico”[7],que aún no entiende o no le conviene entender que Chávez siempre fue un caudillo al servicio del capital[8], cuya misión no era otra que conducir a la quiebra al país con las mayores reservas petroleras del mundo, endeudándolo con una deuda “eterna” cuyo monto y poseedores sigue siendo un secreto.
Esta reducción de hecho del salario de los trabajadores públicos, forma parte de los acuerdos previos que se llevan a cabo con la banca internacional, con miras a refinanciar la deuda externa[9], renegociación que no significara en absoluto ni una solución a la crisis, ni mucho menos al fin del desabastecimiento y al aumento de la inflación. Como bien lo estableció el Fondo Monetario Internacional, la crisis que sufre Venezuela se empezará a sentir con toda su crudeza en el 2015 cuando la hiperinflación, el aumento del desempleo y el retroceso económico, incrementen la acción de los verdaderos agentes del “terrorismo, la subversión y de la guerra económica” como son: desempleo, delincuencia, violencia policial y militar, hambre, miseria y pobreza.
Las candelitas que el Sr. Maduro declaró haber apagado en marzo con motivo de las manifestaciones, se están convirtiendo en un incendio, y para empeorar la situación al Sr. Maduro solo le queda aumentar el precio de la gasolina como última medida para evitar que la chispa incendie la pradera. Por ello, la única salida que le queda a la banda militar-política que dirige al país, es pasar abiertamente a la guerra no convencional, tal como lo declarara el general Padrino en meses pasados.[10] Ante la inflación galopante, el desabastecimiento, el aumento del desempleo y de la crisis, para mantenerse en el poder al gobierno solo le queda el recurso de la violencia, que con especial celo viene cultivando y aupando en los últimos años

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